| 5910 | En los negocios de la vida no es la fe lo que salva, sino la desconfianza. |
| 5911 | En política, un absurdo no es un obstáculo. |
| 5912 | En toda empresa hay que dar dos tercios a la razón y un tercio al azar: aumentad la primera fracción y seréis pusilánimes, aumentad la segunda y seréis temerarios. |
| 5913 | Todo el mundo quiere que los gobiernos sean justos y nadie lo es con los gobiernos. |
| 5914 | En último extremo, hay que ser militar para gobernar; sólo con botas y espuelas se puede gobernar un caballo. |
| 5915 | Es absolutamente indispensable que, al salir de una gran revolución, el Gobierno sea duro. |
| 5916 | Es más fácil dictar leyes que ejecutarlas. |
| 5917 | Es más fácil engañar que desengañar. |
| 5918 | Es muy raro que una numerosa asamblea razone; se apasiona con demasiada rapidez. |
| 5919 | Es necesario seguir los caprichos de la fortuna y corregirla cuando se pueda. |
| 5920 | Hace falta más valor para sufrir que para morir. |
| 5921 | Hay calumnias frente a las cuales la inocencia misma se siente desfallecer. |
| 5922 | Hay en los pueblos un sentimiento interior, profundo, una necesidad que los arrastra al reconocimiento de un Dios, sea el que fuere. |
| 5923 | Hay que desplegar más energía en los asuntos administrativos que en la guerra. |
| 5924 | Hay un solo paso de lo sublime a lo ridículo. |
| 5925 | Imponer condiciones excesivamente duras es dispensar de su cumplimiento. |
| 5926 | Interesarse por los intereses de todos es propio de un gobierno ordinario; preverlos es digno de un gran gobierno. |
| 5927 | Interpretar la ley es corromperla. Los abogados la matan. |
| 5928 | La actitud ociosa de un ejército es su más seguro camino hacia la derrota. |
| 5929 | La ambición de reinar sobre las inteligencias es la más fuerte de todas las pasiones. |
| 5930 | La envidia es una declaración de inferioridad. |
| 5931 | La etiqueta es la cárcel de los reyes. |
| 5932 | La fatalidad es el resultado de un cálculo, del cual algunos factores son incógnitas. |
| 5933 | La frialdad es, en el hombre destinado al mando, la más preciosa cualidad. |
| 5934 | La guerra es una lotería, en la cual las naciones no deben arriesgar sino pequeñas sumas. |